Nuestraesfera | Espacio Educativo

Conciencia Ambiental – Compromiso Ciudadano – Buenas Prácticas

¿Cómo introducir la educación ambiental en la primera infancia?

por

Temas: ,

niños en jardin infantil

Sean de carácter integral o abordando un tema puntual, existen muchas formas de generar conciencia y buenas prácticas ambientales a nivel preescolar. Idealmente, las iniciativas deben involucrar a toda la comunidad educativa, capacitando a docentes e implementando actividades con los niños y sus familias.

En 2012 la UNESCO publicó un libro con 12 ejemplos de programas que se ocupan de la primera infancia en entornos y prácticas de educación para el desarrollo sostenible, incluyendo casos de distintas realidades y continentes. Con ello da una idea de las numerosas formas que puede tomar la educación ambiental en esta etapa de la niñez. Algunas de ellas se presentan a continuación.

Ecopatrulla

Esta buena práctica destacada en el libro de la UNESCO con un ejemplo en Oporto, Portugal, es un útil recurso para involucrar a los niños y sus familias en forma activa en la identificación de conductas ecológicamente apropiadas y que hay que mantener y conductas ecológicamente incorrectas y que hay que modificar, y en la generación de campañas y acciones concretas para actuar en consecuencia.

Energía

materialkiste-2-El proyecto alemán “Leuchtpol” introduce la educación para el desarrollo sostenible (EDS) en el nivel preprimario a través de los ámbitos de la energía y del medio ambiente. La iniciativa, implementada en unos 4.000 establecimientos hasta 2012, se centra en reuniones de formación complementaria de cinco días para educadores del nivel preprimario, debiendo éstos poner en práctica ulteriormente de EDS sobre “Energía y medio ambiente” en sus establecimientos, recibiendo para ello una serie de conceptos, ideas y materiales.

Valores para la sustentabilidad

En Alemania, la iniciativa “Aprender a orientar la vida – los valores vivos” creó una carpeta que contiene múltiples métodos e ideas para poner en práctica en la actividad diaria de los jardines de infancia valores fundamentales para la relación con las personas y el entorno. Se enfatiza que los valores se desarrollan en las primeras etapas de la vida y constituyen una pauta para ayudarles a decidir lo que realmente necesitan y cómo deben comportarse y actuar con los demás. Entre los temas que aborda se encuentran entendimiento intercultural, medio ambiente, promoción de la salud, cambio climático, ética, recursos hídricos, diversidad biológica, democracia, justicia, y producción y consumo sostenibles.

En Japón, la Fundación Goi para la Paz ejecuta el programa «Espacio para los niños de la Tierra», buscar fomentar el amor a la paz y formar a ciudadanos del mundo responsables desde la más tierna edad. Los cuatro valores esenciales que se intenta inculcar a los niños mediante diversas actividades son: la Independencia, para que lleguen a sentirse responsables de sí mismos; la Armonía, para cultivar la capacidad de establecer la comunicación y las relaciones de cooperación; la Comprensión mundial, para fomentar una perspectiva mundial y para que sepan apreciar el valor de la Tierra; y el Amor y la Paz, para crear una voluntad de ser útil a la gente y a la sociedad y contribuir a la paz. En su funcionamiento diario, voluntarios muy activos se ocupan de la coordinación del programa y de la supervisión de los niños que en él participan, estando el programa abierto a todos los del vecindario. Se invita, en calidad de conferenciantes e instructores, a expertos en determinadas actividades culturales, como la papiroflexia, la narración, las actividades al aire libre, el cultivo, la ceremonia del té, las artes marciales, y las artes del teatro y la comunicación. Las escuelas, los centros comunitarios y las bibliotecas locales ponen a disposición sus locales para las actividades después de las horas de clase y los fines de semana. Los padres, los ancianos, y a veces algunos extranjeros residentes y estudiantes en programas de intercambio participan en el programa junto con los niños.

Jardín infantil "verde"

En la república oceánica de Vanuatu, el proyecto “Jardines de la Infancia Verdes” de Live and Learn Environmental Association y de la Vanuatu Early Childhood Association (VEJA) se orientó a reducir los desechos y el consumo de energía y de agua en los establecimientos preescolares, y  ayudar a los niños pequeños a comprender cuál es el lugar que ocupan en la naturaleza y cuál puede ser su contribución positiva ante los problemas ambientales con que nos enfrentamos.

-El jardín infantil Pupeñi, en Chile, es destacado como un ejemplo de un jardín que ha trabajado por muchos años la temática energética promoviendo la disminución en los niveles de consumo de agua y luz tanto dentro de los hogares como en el jardín. La metodología pretende asociar a la comunidad para mejorar su entorno a partir de una gestión ambiental participativa, desarrollando en una primera etapa actividades tales como: talleres participativos, relación energía-medio ambiente, eficiencia energética, programas de capacitación respecto de la confección y uso de ollas brujas como una forma complementaria al uso de cocinas de gas y desarrollo de una feria demostrativa en la cual las beneficiarias exhiban este tipo de tecnologías y sus aplicaciones. Asimismo, se realizan jornadas de educación de la problemática ambiental, profundizando en los impactos ambientales provocados por el desaprovechamiento de la energía, promoviendo el recambio de luminarias en salas y pasillos del establecimiento y la utilización de ampolletas eficientes. A su vez, este centro educativo desarrolla proyectos medioambientales que comprenden la eliminación de basurales y sitios eriazos como focos de insalubridad. Así, a través de la creación de plazas, áreas verdes, huertos, viveros y minigranjas se inicia un trabajo complementario y de apoyo a la labor educativa.

La bandera ecológica

bandera azulEn Costa Rica, el Programa Bandera Azul Ecológica para Centros Educativos del Ministerio de Educación Pública se inicia en 2004 como una forma de organizar a la comunidad educativa para realizar proyectos ambientales y crear conciencia de la importancia de proteger los recursos naturales e incentivar prácticas higiénicas. Participan voluntariamente desde centros preescolares hasta universidades, los que son evaluados por un equipo interdisciplinario con el fin de certificar el trabajo que realizaron durante el año, asignando un puntaje en los ámbitos de servicio de agua para consumo humano, servicio sanitario y evacuación de desechos líquidos, higiene de aulas y otras instalaciones, educación ambiental, y administración y seguridad. Si obtienen un puntaje de 90 a 99 se les otorga una Bandera Azul con una estrella; si obtienen 100 y se trata de proyectos ambientales con impacto institucional, se les otorga una Bandera Azul con dos estrellas; y si el impacto es comunal y además promueven la gestión del riesgo y abordan las temáticas en el aula, se les otorga una Bandera Azul con tres estrellas. Aquellas instituciones que la ganan, automáticamente participan el siguiente año, impulsando, mejorando y/o involucrando a toda la comunidad.

Materiales audiovisuales

En Francia, el proyecto “¿Y qué tal va… la Tierra?” realizado por un jardín infantil generó 15 películas de animación con alumnos entre 4 y 6 años, para contribuir a la educación para la eco-ciudadanía y el desarrollo sostenible.

Buenas prácticas de educación para el desarrollo sostenible en la primera infancia

pdf

2 MB

Descargar
Explorar archivo de Publicaciones Archivo de Recursos